Con el aumento de la cantidad de polen, muchas personas estornudan, les pican los ojos y se sienten mal en general. Las alergias estacionales, también conocidas como fiebre del heno o rinitis alérgica, son algo más que un inconveniente menor. Para millones de personas, son una auténtica afección médica que puede alterar la vida cotidiana y empeorar otros problemas de salud, como el asma, las infecciones sinusales y las infecciones de oído. Afortunadamente, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) regula varios medicamentos diseñados para aliviar estos síntomas.
¿Qué son las alergias estacionales?
Las alergias se producen cuando el sistema inmunitario reacciona de forma exagerada ante una sustancia inofensiva, como el polen, identificándola como un invasor. En respuesta, el organismo libera sustancias químicas como la histamina, que desencadena síntomas como goteo nasal, picor de ojos, estornudos y congestión. Las alergias estacionales suelen estar causadas por el polen de las plantas, con diferentes tipos que alcanzan su máximo en diferentes épocas del año:
- Polen de los árboles a principios de primavera
- Polen de gramíneas a finales de primavera y principios de verano
- Polen de malas hierbas, como la ambrosía, a finales del verano y en otoño.
- Ciertos tipos de moho también pueden exacerbar los síntomas de la alergia estacional.
Estrategias sencillas para minimizar la exposición
Evitar el polen es una de las mejores formas de controlar los síntomas. Aquí tienes algunas formas de reducir tu exposición:
1. Cierre las ventanas de su casa y de su coche, sobre todo cuando el recuento de polen sea elevado.
2. Dúchese antes de acostarse para eliminar los alérgenos de la piel y el cabello.
3. Quédese en casa cuando los síntomas sean graves, sobre todo en días ventosos.
Sin embargo, no siempre es factible permanecer en casa toda la temporada. Los medicamentos pueden ser necesarios cuando los síntomas son especialmente intensos o persistentes.
Opciones de medicación para aliviar la alergia
Existen varios tipos de medicamentos antialérgicos, tanto de venta libre como con receta. He aquí un resumen:
Antihistamínicos
Los antihistamínicos bloquean la histamina, la sustancia química responsable de muchos de los síntomas de la alergia. Están disponibles en comprimidos, líquidos y aerosoles nasales. Algunos antihistamínicos pueden causar somnolencia, por lo que es esencial leer la etiqueta para conocer los posibles efectos secundarios y las instrucciones de dosificación.
- Antihistamínicos sedantes: Utilícelos con precaución, ya que pueden alterar su capacidad para conducir o manejar maquinaria.
- Antihistamínicos no sedantes: Están disponibles tanto con receta como sin ella y es menos probable que causen somnolencia.
Corticosteroides nasales
Los corticoesteroides nasales reducen la inflamación y la congestión nasal. Suelen pulverizarse en la nariz una o dos veces al día. Están disponibles sin receta y con receta médica, pero consulta con tu médico si tú o tu hijo los necesitáis durante periodos prolongados.
Descongestionantes
Los descongestionantes alivian la congestión nasal y están disponibles en comprimidos, líquidos y aerosoles nasales. Sin embargo, deben utilizarse durante periodos cortos, ya que su uso excesivo, sobre todo con los aerosoles nasales, puede empeorar la congestión (lo que se conoce como "efecto rebote"). Algunos descongestionantes contienen pseudoefedrina, que hay que pedir al farmacéutico y mostrar un documento de identidad para comprarlos.
Inmunoterapia (inyecciones o comprimidos antialérgicos)
Para un alivio a largo plazo, la inmunoterapia con alérgenos ayuda al organismo a desarrollar tolerancia a los alérgenos mediante inyecciones periódicas o comprimidos sublinguales (bajo la lengua). Este tratamiento puede durar varios años, pero con el tiempo puede reducir significativamente los síntomas e incluso disminuir la necesidad de medicación.
- Inyecciones antialérgicas: Las inyecciones se administran semanalmente, con un aumento gradual de las dosis a lo largo del tiempo.
- Comprimidos sublinguales: Utilizados para alergias estacionales específicas, estos comprimidos requieren receta médica y deben empezarse a tomar varios meses antes de la temporada de alergias.
Los niños y los medicamentos antialérgicos
Los padres deben consultar siempre la etiqueta de información sobre el medicamento cuando elijan medicamentos sin receta para niños. Algunos medicamentos pueden administrarse a niños a partir de dos años, pero otros tienen restricciones de edad. Consulte siempre a un profesional sanitario para conocer la dosis adecuada y las recomendaciones del producto.
Para más información, póngase en contacto con la FDA
Si tiene alguna pregunta o necesita más información sobre los medicamentos antialérgicos, la División de Información sobre Medicamentos de la FDA puede ayudarle. Puede ponerse en contacto con ellos en el 1-855-543-3784, 1-301-796-3400 o druginfo@fda.hhs.gov.
Las alergias estacionales pueden ser un reto, pero si conoce los factores desencadenantes, minimiza la exposición y conoce las opciones de medicación, podrá controlar los síntomas y disfrutar de la estación más cómodamente.