Rueben Bain Jr, liniero defensivo de primer año de Miami, ha tomado innegablemente la escena del fútbol universitario por asalto esta temporada. Su capacidad para ejercer una presión constante sobre los mariscales de campo y sus contribuciones contra la carrera lo han impulsado a la vanguardia de la defensa de Miami, todo ello en su temporada de debut como Miami Hurricane.
El rendimiento de Bain esta temporada es extraordinario, marcado por estadísticas notables y calificaciones de primer nivel. Presume de unas impresionantes 29 presiones al quarterback, una cifra que lo sitúa firmemente en la cima de los linieros defensivos de primer año de la nación. Este logro supera incluso al anterior líder de Miami en 2022, Akheem Mesidor, que registró 28 presiones.
Pro Football Focus ha otorgado a Bain una impresionante nota defensiva de 89,4, lo que le convierte en el jugador defensivo mejor valorado no sólo de la lista de Miami, sino también entre los linieros defensivos de primer año del país. Entre toda la competencia, su calificación defensiva le sitúa como el octavo mejor extremo defensivo del país según la PFF. Sus estadísticas de la temporada incluyen 19 placajes, cinco placajes por pérdida, 4,5 sacks y dos balones perdidos forzados. Además, ha jugado 297 partidos defensivos en sólo siete encuentros con Miami.
En una emocionante victoria por 28-20 en la prórroga contra Clemson, Bain demostró sus excepcionales habilidades, especialmente durante el último cuarto y la prórroga. El seleccionador Mario Cristóbal describió acertadamente a Bain como un "destrozador de partidos", destacando su inquebrantable intensidad y su impacto perturbador, incluso contra jugadores experimentados. La actuación de Bain en el partido del sábado incluyó diez presiones (líder nacional en la octava semana), ocho placajes, dos placajes por pérdida, dos sacks y un fumble forzado.
En ausencia del lesionado liniero defensivo Akheem Mesidor, Bain se ha erigido en un faro de esperanza, tanto para el presente como para el futuro. Su implacable ética de trabajo, su inquebrantable determinación y su capacidad de adaptación le han permitido asumir un papel importante esta temporada. Está claro que no es el típico jugador de primer año; en sus cinco primeros partidos como titular, ha consolidado firmemente su estatus como piedra angular de la defensa de Miami.