Los apasionados aficionados al fútbol del sur de Florida, a los que se unieron los equipos de baloncesto masculino y femenino de la Universidad de Miami, inundaron las gradas del estadio DRV PNK el sábado, pero no fue suficiente para impulsar a su equipo local a una victoria muy necesaria, ya que el Inter de Miami perdió su quinto partido consecutivo por 1-0 ante el FC Dallas.
"Siento como si estuviéramos tan cerca, pero tan lejos", dijo el entrenador de Miami, Phil Neville. "Da la sensación de que estamos cerca de entrar en una racha ganadora, estamos cerca de ser ese equipo que marca tres o cuatro goles, pero nos castigan".
"No vamos a compadecernos de nosotros mismos. Voy a asumir toda la responsabilidad por toda esta racha de derrotas... Tenemos que darle la vuelta ahora y tenemos que darle la vuelta rápido."
Tras un prometedor comienzo de temporada (2-0), Miami ha caído en la clasificación de la Conferencia Este de la MLS. Una de las razones de estos males ha sido su falta de ataque, que se quedó sin marcar en cuatro de sus cinco derrotas esta temporada.
Había esperanzas de que esta mala tendencia ofensiva se frenara contra Dallas con el debut en la temporada del delantero estrella Leonardo Campana.
Miami se centró en involucrar a Campana, que utilizó un exceso de centros en un intento de poner al ecuatoriano de 22 años en posición de marcar. Campana fue sofocado por la feroz defensa de Dallas y no intentó ningún disparo.
Miami, a pesar de tener el balón durante el 69% del tiempo, no logró mantener los ataques, especialmente al principio del partido. No tuvo su primer tiro a puerta hasta el minuto 42, cuando el delantero Nicolás Stefanelli remató con láser hacia la esquina superior derecha de la portería. El guardameta del FC Dallas, Maarten Paes, detuvo el disparo.
Dallas, comparativamente, fue mucho más directo en sus ataques. Sus delanteros realizaron 16 disparos, ocho de ellos a puerta. Dallas se puso por delante en el marcador en el minuto 27, cuando el delantero Jesús Ferreira remató con la zurda un disparo a bocajarro asistido por Jesús Jiménez.
Este fue el gol número 40 de la carrera del jugador de 22 años en la liga, estableciendo el récord de la MLS como el jugador más joven en lograr ese hito.
Drake Callender evitó lo que podría haber sido una actuación aún más dominante de Ferreira y el ataque de Dallas. El portero de cuarto año terminó con siete paradas, empatando su récord de la temporada, incluyendo un bloqueo espectacular en un disparo que se dirigía a la esquina posterior izquierda de la meta durante el minuto 60.
"No puedo decir que haya tenido una actuación perfecta esta temporada, pero siempre intento afrontar cada partido con la misma mentalidad", dijo Callender. "Mi papel en el equipo es el de líder. Es hacer todo lo posible para que el balón no entre en la portería contraria, y creo que si me atengo a mis valores fundamentales de ética de trabajo, actitud y buena energía, creo que eso se demostrará en el campo."
Aunque el ataque de Miami tuvo problemas durante la mayor parte del partido, dispuso de oportunidades para empatar el marcador durante el tramo final.
En el minuto 70, el centrocampista Rodolfo Pizarro envió por el aire un disparo desde el centro del área. 13 minutos después, el delantero Shanyader falló por poco un cabezazo a la izquierda de la portería en un tiro libre de Jean.
En el tiempo añadido, Mota provocó una falta en el área. Los 17.287 espectadores aplaudieron, pero luego abuchearon en señal de desaprobación tras la anulación de la falta.
Tras una semana de descanso, Miami (2-0-5) volverá a la acción el 22 de abril a las 20:30 contra el Houston Dynamo FC en el Shell Energy Stadium. Dallas (3-2-2) regresará a Texas y jugará el 15 de abril a las 20:30 contra el Real Salt Lake.
